En 2011, el equipo de la doctora Susan Harkema de la Universidad de Louisville (Kentucky - EEUU) publicó un artículo en el que explicaban cómo habían conseguido que una persona paralítica del pecho hacia abajo consiguiese mantenerse en pie estimulando directamente su médula espinal con una señal eléctrica. Este resultado extrañó a la comunidad científica, puesto que no era la primera vez que se intentaba algo parecido y los resultados no eran nada satisfactorios.
En la década de los 70 se comenzó a experimentar con la estimulación eléctrica de la médula espinal con el fin de controlar el movimiento de los músculos. El éxito de este último experimento radica en utilizar niveles de tensión eléctrica bajos, en comparación con los niveles que se han usado en las últimas cuatro décadas.
Utilizando un equipo de estimulación eléctrica orientado al tratamiento del dolor, se ha conseguido provocar el movimiento de músculos aislados situado de la cintura para abajo en personas parapléjicas. El equipo dispone de 16 electrodos y se han realizado múltiples experimentos variando los patrones de estimulación. Actualmente se está trabajando en el desarrollo de un equipo específico para la estimulación de los músculos que además de estimular los nervios, monitoriza la reacción de los músculos (mediante un electromiografía) y requier el uso de un sistema de procesamiento (ordenador) que permita ajustar los patrones a movimientos concretos y estables. El Instituto de Tecnología de California colabora en el desarrollo de este sistema más avanzado.
El dispositivo que se está desarrollando todavía tiene que ser aprobado por la FDA (U S Food and Drug Administration) por lo que se tardará un tiempo en poder continuar con la investigación.
Unos de los pacientes que ha participado en la investigación ha conseguido realizar leves movimientos voluntarios y recuperar parte del control de la vejiga, aunque al ser un caso aislado todavía no es posible saber si esta recuperación se ha debido a otros factores. Se espera que con el nuevo prototipo se puedan determinar los beneficios reales de esta nueva técnica.
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