Cada año el instituto ECRI proporciona una lista con el Top 10 riesgos asociados a dispositivos médicos con el fin de informar a las instituciones acerca de la importancia de los problemas asociados al uso de la tecnología.
El uso seguro de los dispositivos médicos ya sean equipos básicos o simples, hasta sistemas complejos requiere de la identificación de posibles fuentes de peligro o dificultades de estas tecnologías con el fin de tomar acciones para disminuir la probabilidad de que ocurran eventos adversos. Este listado representa una lista de problemas para informar a las instituciones y que pueden ser evitados o minimizados a través de una buena y cuidadosa gestión de la tecnología.
El Top 10 se construye a partir de riesgos generales, es decir, problemas inherentes al uso o a la combinación de las tecnologías. No se enfoca en riesgos o problemas de modelos o proveedores específicos.
El equipo de dispositivos médicos de la ECRI compuesto por Ingenieros, científicos, clínicos y otros expertos nominan los problemas de acuerdo a su propia experiencia y conocimientos adquiridos a través de:
Investigación de Incidentes
Prueba de dispositivos médicos
Observación y evaluación de hospitales
Revisión de la literatura
Entrevistas con clínicos, ingenieros clínicos, administradores de tecnología, comités de compras, administradores hospitalarios y proveedores.
De igual manera los expertos consideran miles de informes que llegan a través de sus sistemas y de las instituciones aliadas que comparten información de seguridad con ellos.
Después de la fase de nominación, profesionales del instituto ECRI y miembros asesores externos hacen una revisión y seleccionan el top 10 de acuerdo a los siguientes criterios:
Severidad: ¿Cuál es la probabilidad que el riesgo ocasione daños serios o la muerte?
Frecuencia: ¿Cuál es la probabilidad que el riesgo pueda ocurrir a menudo?
Expansión: Si el riesgo ocurre ¿Las consecuencias pueden afectar a un gran número de pacientes ya sea dentro o fuera de la institución?
Percepción: ¿El problema es difícil de reconocer? ¿Puede el problema conducir a una serie de problemas antes de ser identificado o corregido?
Perfil: ¿El riesgo es propenso a recibir publicidad significativa? ¿Puede ser reportado en los medios de comunicación y puede afectar negativamente a la institución? ¿El riesgo puede ser foco de atención de las agencias reguladoras?
Prevención: ¿Se pueden tomar acciones que prevengan el problema o que disminuyan el riesgo? ¿Dar a conocer el riesgo ayudaría en un futuro a reducir las ocurrencias?
No todos los riesgos aplican necesariamente a todas las instituciones. De igual manera se aclara que los riesgos identificados en anteriores publicaciones no significan que no merezcan atención ni deban ser considerados, dado que la mayoría de los riesgos persisten y los hospitales deben continuar trabajando para minimizarlos.
Estos son los top 10 identificados en el informe de este año:
Errores en la infusión de medicamentos por bombas de infusión.
Limpieza inadecuada de dispositivos reusables que son complejos.
Alarmas de ventiladores mecánicos pasadas por alto.
Depresión respiratoria no detectada en anestesia.
Riesgos con dispositivos de calor-frio en cirugía cardiotorácica.
Mala gestión del software médico.
Riesgo ocupacional de radiación en quirófanos híbridos.
Error en la configuración de gabinetes automáticos dispensadores de medicamentos.
Mal funcionamiento o mal uso de grapadoras quirúrgicas.
Fallas en los dispositivos médicos por malas prácticas de limpieza y productos inadecuados.
Este documento fue publicado por la revista Health Devices en noviembre de 2016. Podeis solicitar una copia gratuita aquí,